Lo que expresan estas carnes

Amores no correspondidos y cómo hacerlos corresponder Que alguien no te corresponda, por la razón que sea, es la cosa más jodida del mundo. Es terrible confirmar que aún cuando tus intenciones son las mejores, eso no es suficiente para el otro. Dar todo y no recibir algo a cambio duele (aunque protesten los que dicen que “se ama sin esperar algo a cambio”. El amor es más saludable cuando es recíproco). No es un tema sencillo de hablar, porque obviamente a mí tampoco me han correspondido en más de una ocasión. Trataré de hablar del tema con el mayor raciocinio que mi mentecita retorcida pueda tener (como si yo tuviera tal cosa: raciocinio). TIPOS DE AMORES NO CORRESPONDIDOS: ü   Amor NO correspondido nro1: Amor platónico ¡Qué jodido es tener un amor platónico! Tus energías se van en tu amor platónico. Puedes pasarte horas y horas viendo sus fotos de instagram, sus estados en facebook, y estando en lugares en los que sabes que probablemente estará. Incluso no te importa

Definición de amor en 13 palabras: Después de experimentar una estruendosa vida amorosa en más de una ocasión (aunque puedo contar ese “ en más de una ocasión” con los dedos de una de mis manos), siempre me preguntaba qué era o es realmente el amor, puesto que todos somos distintos y tenemos cierta definición de este (algunas más distorsionadas que otras). Al final, ninguna definición logró concretarse o ser aceptada en mi mentecita retorcida. Llegué a la conclusión de que el amor no es algo concreto, no tiene que serlo necesariamente, de que puede englobar muchísimas definiciones en una, o ser una definición que equivalga miles. ¿No entienden, cierto? No tienen por qué hacerlo: ni yo lo hago. Escogí trece palabras al azar y busqué la existencia del amor en dichas palabras. Porque para mí el amor lo puede ser todo. Desde una estrella hasta un río, pasando por una arepa frita con tajadas, finalizando en el humo de un cigarrillo. Las palabras que seleccioné las escogí por

Ø   Cosa número uno: Convertirte en agente privado del FBI. (En palabras de a centavo, ser Stalker profesional) A este primer punto yo lo llamo, con el permiso de los psicólogos: “Miedo a hacerse cargo de uno mismo”. Cuando acabas de terminar una relación (o acaban de terminarte) el organismo, si no se resigna, conduce al cuerpo (y yo sé de esto) a cometer cualquier tipo de estupideces para estar al tanto de la vida del otro. El desespero de querer saber del otro comienza por ver su chat y si no bastara con eso, intentas retroceder el tiempo a base de mensajes, para encontrar el primer mensaje que recibiste de él o ella. Todo dependerá de cuán apegado estés. Pero si solo se tratara de mensajes… Luego, entras a su perfil, lo revisas de pie a cabeza, como si en tu inicio no apareciesen sus publicaciones. Y es que para más colmo, crees tener un poquito de dignidad y lo bloqueas, para luego arrepentirte y sentirte estúpido e inmaduro, porque por unos tres segundos te siente

Cuando realmente ame quiero sentirlo con toda la fuerza que tal cosa conlleve. Quiero vivirlo de verdad. Quiero entregarme por completo y sentir que la otra persona lo hace también. Y si no lo hace, quiero amar de igual manera o más fuerte. Quiero mostrarme tal cual soy; con errores, con defectos, con miedos, con ideas obscuras, con sueños probablemente irrealizables, de los cuales no tenga pena decirlos por miedo a lo que pueda decirme o cómo pueda reaccionar esa otra persona. Quiero desnudarme por completo, deshacerme una a una de esas prendas que puedan obstaculizar la vista de mi cuerpo físico, mental, espiritual. Y mientras me desnude, sujetar sus manos y acercarlo a que conozca lo que soy, para que se quede o se vaya. Pero quiero amar realmente, pura y sin malas intenciones. Quiero entregarme sin culpas ni reservas, sin sacrificio alguno. Quiero conocer sus pensamientos y saber lo que es capaz de hacer con solo yo mirarlo. Quiero hacerlo reír hasta que me suplique dejar de decir